GRACIA Victoria

([1840]-Barcelona, 1914)

Jean-Claude SEGUIN VERGARA
Palmira GONZÁLEZ LÓPEZ

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Mariano Belio (Saragosse-) épouse Joaquina Gonzalbo (Saragosse-). Descendance:

  • Mariano Belio Gonzalvo (Granollers, 1831-Barcelone, 10/02/1899) épouse Victoria Gracia Gracia (Saragosse, 1840-Barcelone, 02/11/1914). Descendance:
    • Mariano Belio Gracia (Saragosse ou Alagón 1865-Barcelone, 11/05/1935) épouse (Iglesia Poble Sec, 1900) Julia Peche Sandoval (Logroño-). Descendance:
      • Victoria Belio Peche (1902-)
      • Mariano Belio Peche (1904-)
      • Julia Belio Peche (1906-)
    • Manuel Belio Gracia ([1868]->1913)
    • Dolores Belio Gracia (Saragosse, 07/07/1869-Barcelone, 21/04/1957) épouse Vicente Alafont Marcos. Descendance:
      • Dolores Alafont Belio 
      • Francisco Alafont Belio
      • Vicente Alafont Belío ([1900]-Barcelone, 27/02/1948) épouse Clementina Prevosti. Descendance:
        • Vicente Alafont Prevosti.
        • Marisol Alafont Prevosti.

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Natural de Zaragoza, es la esposa de Mariano Belio Gonzalvo y la madre de Mariano Belio GraciaManuel Belio Gracia. y Dolores Belio Gracia. La familia ya está en el mundo de los espectáculos itinerantes desde por lo menos 1880, cuando Mariano Belio Gonzalvo solicita una plaza para una barraca de figuras de cera para las fiestas patronales de Bilbao. No sabemos en qué momento los Belio empiezan con sus actividades en Barcelona. Tal vez, en 1885, cuando alguien solicita un permiso para instalar unos entoldados, en la Plaza de Cataluña, para exponer figuras de cera. La capital cataluña se convierte en una etapa frecuente en la itinerancia de la familia. De hecho, en julio de 1888, los Belío instalan un museo de figuras de cera en la misma plaza de Cataluña :

Don Mariano ha comenzado a colocar en la plaza de Cataluña, de Barcelona, el pabellón en donde ha de exhibir su magnífica colección de figuras de cera, tan conocida y apreciada en esta localidad.
Con motivo de la Exposición Universal ha introducido en ella grandes mejoras de sumo gusto artístico y confeccionado una parción de grupos históricos que han de llamar seguramente la atención, mereciendo entre estos especial mención el que representa la "Batalla de Watterloo", por la naturalidad que caracteriza a las figuras y riqueza del vestuario.


Diario de avisos, Zaragoza, martes 1º de mayo de 1888, p. 8.

Los pabellones de figura de cera suelen ser uno de los barracones más apreciados por la población, pero constituyen un auténtico peligro por ser tan inflamable el material utilizado. De hecho, cuando ya lleva la familia casi tres meses y medio en la Plaza de Cataluña, se incendia parcialmente el museo:

Una explosión
Esta mañana ha habido una explosión de gas en el pabellón de figuras de cera que se exhibe en la Plaza de Cataluña junto al Circo Ecuestre.
Al oír la fuerte detonación han acudido al sitio de la explosión los dependientes de la casa, los del Circo Ecuestre y los guardias municipales que prestan servicio en la referida plaza, logrando sofocar a los pocos momentos el fuego que se produjo a consecuencia de la explosión. El techo que sirve de entrada a la galería se ha desplomado, quemándose algunas figuras y varios objetos, sin que afortunadamente haya que lamentar desgracias personales.


La vanguardia, Barcelona, 11 de octubre de 1888, p. 2.

No por eso deja de funcionar el Museo, ya que sigue anunciándose hasta el mes de julio de 1889 y sólo es remplazado, en marzo de 1890, por un fonógrafo Edison:

En la Plaza de Cataluña y en el lugar donde se exhibían las figuras de cera, ha instalado M. Charles Kalb un espectáculo interesante y curioso: es el fonógrafo de Edisson. Ante el público se ejecutan interesantes y sorprendentes experimentos de tan notable aparato, y vale la pena de verlo.


La Publicidad, Barcelona, 20 de marzo de 1890, p. 3.

Al año siguiente, en 1891, un pabellón de figuras de cera, en la misma Plaza de Cataluña, está funcionando. Tal vez sea el de la familia Belío. La vida de feriantes lleva la familia a tener que viajar con frecuencia hasta que piensa en asentarse primero en Lérida, luego en Granollers y finalmente en Barcelona:

No ignoraven, i n'eren conscients, les nioltes incomoditats i inconvenients que havien de suportar: curts i llargs viatges per carreteres, camins i sendes, transportant aquella instal•lacid a base de galeres i carretes; fins que un dia s'endinsen per terres de Catalunya fins a arribar, primer, a Lleida, on s'instal•len una curta temporada, per traslladar-se despres a Granollers, i d'aqui a Barcelona, on s'instal•len definitivament fixant el seu domicili al carrer del Dormitori de Sant Francesc, núm. 3. El museu queda instal•lat a la part baixa de la Rambla, a la de Santa Monica, als baixos d'una casa que feia cantonada amb el carrer d'Anselm Clavé, justament en un racó que forma la placeta de la Porta de la Pau.


Josep del Castillo i López, "Els germans Belio Gracia i el Belio-graff", Cinematògraf, segone època, nº 1, 1992, p. 90.

La familia sigue, sin embargo, su vida itinerante y viajan por España y, en mayo de 1898, están de vuelva a Barcelona e inauguran su pabellón de figuras de cera en la Plaza de la Paz:

Gran museo de figuras de Cera. Situado en la plaza de la Paz.-Entrada 30 céntimos.-Jueves Moda de 4 a 11 noche.


La Publicidad, Barcelona, 23 de mayo de 1898, p. 4.

Gracias al periodista “Doys”, disponemos de una descripción bastante precisa del interior del barracón:

Ayer entré a ver las figuras de cera que hay en Atarazanas.
Hay cuadros que representan desafíos: el copiado del cuadro de Garnelo, y el copiado de otro cuadro en que hay dos señoras desnudas de medio arriba que, florete en mano, se deben sin duda disputar algún tímido Tenorio.
Para que el cuadro de los desafíos fuese completo, faltaba el del cardenal Sancha con el deán de Toledo.
Con las sotanas arremangadas, puestos en guardia airosamente, harían el pendant al desafío de las señoras.
También entre los cuadros de figuras de cera hay una ejecución por medio de la electricidad, que recomiendo a Rubricata por lo que pudiese tronar.
Asimismo hay un cuadro de bailarinas muy recomendable por sus piernas. Hay una sentada en un sofá que las tiene superiores. Ni las de mi antigua conocida la Mochila…
Y vean ustedes como sin querer estoy haciendo el reclamo.
Pero ¡qué diablo! que viva todo el mundo.


La Publicidad, Barcelona, 26 de mayo de 1898, p. 1.

Lleva unas pocas semanas atrayendo al público cuando, en la madrugada del 15 de junio, el barracón se incendia por completo y resulta herido de gravedad, un empleado, Martín del Olmo y Barbero. La desgracia ocurre cuando el pionero Estanislao Bravo acaba de instalar su propio pabellón cinematográfico en la misma plaza. Arruinados por no estar asegurado el barracón, los Belío piensan probablemente que el negocio del nuevo invento puede ser más rentable, y tal vez, menos peligroso. Tras un primer intento fallido, es Victoria Gracia la que consigue que, el 14 de septiembre de 1898, se autorice, por un precio muy económico, la instalación de un barracón para la cinematografía:

Por la exigua cantidad de cincuenta pesetas mensuales en concepto de derechos, insignificante si se compara con el alquiler de otro local de igual capacidad, y no obstante no tener atribuciones para ello, por la Alcaldía se concedió en 14 de septiembre de 1898, autorización a doña Victoria Gracia, para que ocupando una superficie de vía púbica de veintiocho metros de largo, por diez de ancho, en la Plaza de la Paz, uno de los sitios más concurridos de esta población, levantase, su marido, un Pabellón de madera, con el fin de exhibir un cinematógrafo, y dar audiciones fonográficas, permitiendo el Ayuntamiento el funcionamiento de tal espectáculo, no obstante no haber satisfecho el concesionario el arbitrio o impuesto establecido en el capítulo 3º, artículo 4º, partida 9ª y párrafo 2ª de la Tarifa 4ª aplicable al indicado concepto del capítulo y artículo referido del Presupuesto ordinario entonces vigente.


“Inspección Municipal – Cargos y descargos (continuación) Cinematógrafo de la Plaza de la Paz”, La Vanguardia, Barcelona, miércoles 10 de octubre de 1900, p.5.

Como se puede apreciar aquí sólo se habla de Victoria Gracia y de su esposo, y no de los hijos, lo que parece indicar que los padres, en 1898, siguen llevando el negocio. La autorización sólo está prevista para un mes y caduca el 14 de octubre de 1898, pero la Alcaldía prorroga por diez veces dicho permiso, con unas condiciones económicas muy favorables. Tal vez influya el comportamiento solidario de los Belío con los soldados de la guerra de Cuba:

En un barracón sito en la plaza de la Paz y junto al muelle, donde se exhibe un fonógrafo y cinematógrafo y cuyos dueños (si no me equivoco) son aragoneses, se estableció una especie de restaurant, en el que los recién llegados tomaban un refrigerio, y de allí eran llevados a sus destinos, en carruajes preparados, los que más lo necesitaban, y a pie aquellos que el estado de salud se lo permitía, llenando el corazón de tristeza el ver a algunos de aquel gran grupo de defensores de la patria, cuyas fuerzas iban amenguando por momentos.


Diario de Huesca, Huesca, miércoles 16 de noviembre de 1898, p. 2.

El que Victoria Gracia ya haya hecho los trámites para el pabellón cinematográfico parece indicar que su esposo Mariano Belío Gonzalvo no está en estado de realizarlos él mismo. De hecho, muere el 10 de febrero de 1899, dejando entre las manos de su esposa el negocio y sólo a partir de ese momento, los hijos se convierten, con su madre, en los dueños del cinematógrafo como lo confirma el artículo publicado en 1900 por La Dinastía:

La señora viuda y los hijos de don Mariano Belio, dueños del cinematógrafo instalado en la plaza de la Paz, deseosos de contribuir a la suscripción abierta por la benéfica Asociación de la Cruz Roja, para atender a las necesidades de los repatriados civiles, exprisioneros de los tagalos, han acordado ceder la totalidad de la entrada que se obtenga durante el lunes próximo, 8 del corriente; debiendo hacer presente, que además de las nuevas películas que han de exhibirse el domingo anterior en todas las sesiones destinadas a tan benéfico fin, se darán a conocer otros cuadros nunca vistos en Barcelona.
Es digna de imitarse la generosa conducta de los mencionados dueños de dicho Cinematógrafo, quienes además de haber dado ya dos funciones a beneficio de la Cruz Roja, tienen ofrecido su local por si es necesario durante los desembarcos para la asistencia de los repatriados.


“Crónica local”, La Dinastía, Barcelona, sábado 6 de enero de 1900, p. 2.

Tal vez las acciones caritativas hacen que el Ayuntamiento sea algo flexible con los exhibidores que, finalmente, presentan una nueva solicitud, el 8 de mayo de 1900, para “ensanchar y repintar la instalación”, que es denegada. Finalmente, tras una nueva prórroga, el barracón de la Plaza de la Paz es derribado entre el 25 y el 27 de octubre de 1900. Lo que queda claro, es que Victoria Gracia tieneo un papel relevante y es ella la que hace los trámites necesarios para lanzar la exhibición del cinematógrafo, convirtiéndose así en una de las pioneras españolas. Si bien es cierto que los hijos se unen a su madre, y luego desarrollan una actividad económica abriendo cines en Barcelona

En lo sucesivo, su nombre ya no aparece en los negocios que llevan sus hijos, en particular el Cinematógrafo Beliograff inaugurado en 1904 en la rambla del Centro. Fallece en la ciudad condal el 2 de noviembre de 1914 y es sepultada en el cementerio de Montjuic el 4 de noviembre de 1914.

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