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- Creado: 24 Marzo 2015
- Última actualización: 11 Enero 2022
- Publicado: 24 Marzo 2015
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Adolfo FÓ
(Alicante, 1858-Valence, 1926)
Jean-Claude SEGUIN VERGARA
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Desde muy joven, Adolfo Fó se dedica a la prestidigitación, y ya en 1876 organiza funciones:
A divertirse.- en los días 7, mucho, 9:10 presente mes, destinados por el vecindario de Ibi a honrar a su patrona, se trasladará a dicha población nuestro paisano el joven prestidigitador Adolfo Fó Juliá con el objeto de dar algunas funciones en aquel teatro de prestidigitación, física recreativa, canción magnética, cartomancia y escamoteo.
Dada la habilidad del Sr Fo esperamos que los espectáculos se vean favorecidos y coronados del mejor éxito.
El Constitucional, Alicante, 5 de septiembre de 1876, p. 2.
Se le conoce como "El Diablo Fó" y de sus actividades como prestidigitador, tenemos una breve biografía publicada en Funchal:
Por referirse a nuestro paisano y querido amigo D. Adolfo Fó, copiamos lo que "El diario da Tarde", periódico que de la luz pública en Funchal (Islas Azores,) dice de este artista digno discípulo de Macallister, a juzgar por los aplausos y ovaciones que recibe allí dónde muestra sus prodigiosas facultades.
Dicho periódico portugués lleva en su primera plana el retrato del Sr Fó y hace su biografía, de la cual entre sacamos los siguientes párrafos:
D. Adolfo Fó, joven de 24 años de edad si a su fisonomía simpática e insinuante reúne un corazón generoso, nació en la ciudad de Alicante el año 1858.
Algunos pormenores de su mocedad de distinguido artista, ya vienen descritos en bosquejo biográfico que ya hace días fue publicado por "El Diario de la Tarde".
Dispénsenos pues, lo repitamos hoy.
Hablar de un artista de comprobado mérito que él solo se conquistó, un nombre honrado de una reputación brillante poniendo en acción la actividad de su inteligencia, auxiliada por su gran fuerza de voluntad.
Adolfo Fó, para conquistar un lugar distinguido en la gloriosa falange de los artistas, tuvo que sujetarse a enormes sacrificios, y debe todo cuanto es, todo cuánto vale a tu propio esfuerzo y a su talento, a su estudio, y a su trabajo.
¡y cuenta apenas 24 años de edad! Y por eso que son justos motivos para admirarnos como artista, sobra razón para respetarle como hombre y como luchador.
Con verdadera vocación para el arte que profesa, consiguió poner atención y atraer las simpatía no solo de sus compatriotas, sino también de los extranjeros, obteniendo de todos, las más justas y espontáneas ovaciones.
Después de tantos triunfos en el continente, en el extranjero, en el archipiélago azoriano, dónde fue acogido lisonjera y honradamente; nuestra buena fortuna le aconsejo a esta Isla de Madera.
Tuvimos entonces ocasión de probar que D. Alfonso Fó en efecto es un buen artista.
Los Funchaleses le hemos hecho justicia.
En efecto anoche en el circo Funchalense asociándose D. Miguel de Fonseca, a la grande obra de Caridad, don Adolfo Fó, probó elocuentemente cuánto vale como artista.
Por desgracia van a dejar brevemente este país en busca de nuevos triunfos al lado de un hombre ama como a padre, continuando infatigablemente la senda gloriosa que se trazó bajo tan felices auspicios.
Está complicada nuestra tarea.
Lo que aquí dejamos escrito muy deprisa, y a mucho correr, sino expresa verdaderamente nuestra simpatía por el afamado joven artista D. Adolfo Fó, no es por falta de sinceridad, sino por la insuficiencia de nuestra pluma.
Funchal 17 julio 1882.
Flor Rete.
Felicitamos a nuestro amigo del modo como merece y hacemos extensivos nuestros plácemes a su apreciable familia a quién deben regocijar mucho los triunfos y el Sr. Fó conquista en los teatros de nuestro vecino reino.
El Constitucional, Alicante, 23 de agosto de 1882, página 2.
A partir de 1897, Adolfo Fó abre un salón Edisson:
Dentro de breves días quedará abierto al público, a cargo del conocido artista nuestro amigo D. Adolfo Fó, el salón Edisson, dónde se darán algunas audiciones con el fonógrafo que ha comprado expresamente con este objeto, y que según nuestras noticias es una cosa notable.
La correspondencia de Alicante, Alicante, 23 de marzo de 1897, página 2.
La inauguración tiene lugar el 28 de marzo de 1897:
Fonógrafo
Mañana se abrirá al público en la calle de Méndez Núñez, un salón de audiciones fonográficas, bajo la dirección del conocido industrial D. Adolfo Fó.
El aparato es de los más perfeccionados; modelo 1896.
No dudamos en ver favorecido dicho local el público, dadas las simpatías de su dueño y la suma perfección del aparato.
El Graduador, Alicante, 27 de marzo de 1897, página 3.
Adolfo Fó presenta también su gabinete en Alcoy:
Es digno de ser visitado el gabinete fonográfico que ha establecido, por unos días, en la calle de San Francisco n.º 13, esquina a la de San Mauro, nuestro amigo el Sr. Fó.
Entre discursos de hombres eminentes como los Sres. Sagasta, Canalejas, Aguilera y el Padre Calpena: fragmentos de reputadas óperas, poesías, etc., cuenta el Sr. Fó con una colección, de más de cien cilindros, todos ellos dignos de ser oífos en el aparato fonográfico.
Recomendamos al público que no deje perder la ocasión que se le presenta de admirar uno de los más maravillosos descubrimientos de la ciencia moderna.
Heraldo de Alcoy, Alcoy, viernes 30 de abril de 1897, p. 2.
El cinematógrafo ([1897]->1926)
Según los propios recuerdos de Adolfo Fó, su afición al cine nace cuando llega a Alicante, el cinematógrafo Lumière:
Visitas de actualidad
La del decano de operadores
De nuevo reanudamos estas modestas "visitas", con la seguridad de que en adelante aparecerán con más regularidad que hasta la fecha y con la promesa de hacer desfilar por estas columnas a todo lo de más actualidad.
Para principio he creído que nadie con más legítimo derecho que el buen amigo don Adolfo Fó, el decano de los operadores valenciano y del que creí podía obtener datos interesantes de los principios del cine en nuestra región. Por eso encaminé mis pasos hacia el feudo del señor Buil-el aristocrático Cine Moderno- en dónde se encuentra prestando servicio, no como operador - aún cuando alguna vez hace de tal-, sino como encargado de pintar las carceleras del mismo y en cuya tarea también es una notabilidad, cómo mis lectores habrán podido apreciar más de una vez.
- Ya sé a lo que viene, Sinovia; pero ¿qué voy a decir? Un viejo como yo solo está para sopitas y no para que los pongan en las revistas.
- No, señor Fó- le respondo, al parque estrecho con respeto la arrugada mano del vejete simpático-. Usted todo lo que me diga ha de ser interesante. Es más; usted es para nosotros los amantes al cinematógrafo la historia viviente del cine valenciano. Así es que le ruego me diga cuándo y cómo se hizo operador cinematográfico...
Y el rostro del honorable anciano se dulcifica: Desenmarañar da las creencias albas de su larga barba; masca con más fruición su pipa ennegrecida y se extiende su mirada, un poco cansada por entre las espirales de humo, buscando los tiempos de su mocedad, cuál en viajes fantásticos, por la reducida estancia que nos sirve de locutorio.
-¡Hace tantos años!- me responde-¡tantos como cuando apareció el cine por primera vez en la región! ¡de treinta a treinta y cinco años! ¡ fui el primero de los operadores!...
-¿Pero es que ya tenía el oficio de operador?
-No, Sinovia, no. Yo vivía en Alicante, de dónde soy natural, retirado de mi profesión de prestidigitador. Solamente cuando necesitaba dinero arreglaba mis bártulos y por los pueblos de la provincia verificaba mis trucos de artista. Vida nómada; pero llevada resignada y placenteramente porque entonces tenía ¡juventud!...
En uno de mis descansos profesionales, ocurrió la presentación de la casa Lumiere en España y como es natural, llegaron a Alicante para la propaganda de sus aparatos. Como quiera que el encargado de la propaganda solo conocía la corriente continua y en Alicante la corriente era alterna, al quedarse con el Teatro Principal se vio en un aprieto, que le zanjó el ingeniero de la fábrica de electricidad Luis Esplá, buscándome a mí. Yo, con el afán de conocer otra profesión desconocida para mí, como para todos mis compatriotas, acepté y entre en calidad de ayudante...
- Al cuál le tomaría afición,¿ verdad, don Alfonso?
- Muchísima- contesto rápido-¡ cómo que ha sido ya mi único oficio!
La Reclam, Valencia, 5 de octubre de 1924, página 5.
Los recuerdos de Adolfo Fó podrían corresponder a julio de 1897 cuando un representante de la casa Lumière está efectivamente en Alicante, pero no parece haberse instalado en el Teatro Principal. Posteriormente, instala con un "capitán del ejército" un barracón:
- Unos dos años, porque por aquel tiempo llegó un capitán del ejército repatriado de Manila con una buena fortuna, la cual se evaporó rápida, por la mala costumbre de tirar de la oreja, de Jorge con demasiada frecuencia. Para evitar la ruina total montó un barracón cerca del teatro Principal y me proporcionó el cargo de operador. Estábamos encantados porque el negocio marchaba bien, pues el público iba aficionando a la escena muda...
La Reclam, Valencia, 5 de octubre de 1924, página 5
De ese barracón tenemos huellas en la prensa alicantina y presenta el "Cinematógrafo Mágico":
El vecino de esta ciudad D. Adolfo Fo, ha solicitado del excelentísimo Ayuntamiento la correspondiente autorización para establecer en la Avenida de Zorrilla un barracón de madera con objeto de instalar en él el último aparato cinematográfico denominado "Cinematógrafo Mágico".
La Correspondencia Alicantina, Alicante, 7 de agosto de 1899, p. 2.
Poco después, consigue la autorización:
Ha sido autorizado el vecino de esta capital don Adolfo Fo Julia, para instalar un barracón de madera en la avenida de Zorrilla con objeto de exhibir el público un aparato cinematógrafo perfeccionado, denominado "El animatógrafo mágico".
La Correspondencia Alicantina, Alicante, 12 de agosto de 1899, p. 2.
Probablemente hacia 1900 o 1901, Adolfo Fó deja Alicante para instalarse en Valencia:
-¿Y cuando vino a Valencia?
- Al poco tiempo y quizá porque al ver el buen cariz que ofrecía el negocio, quiso probar suerte en Valencia y montamos otra barraca en un caserón de la calle de Tránsitos, en el cual solo dimos dos funciones, porque la empresa del teatro Novedades nos indicó la conveniencia de trasladarnos a él, cosa que hicimos.
La Reclam, Valencia, 5 de octubre de 1924, página 5.
Sin embargo, sigue teniendo actividades en Alicante donde, en 1903, instala un cinematógrafo público:
Hoy ha llegado a Alicante procedente de Valencia nuestro amigo y paisano D. Adolfo Fó, encargado de la instalación del cinematógrafo público que sea de exhibir en las próximas fiestas.
Sea bienvenido.
La correspondencia de Alicante, Alicante, 31 de julio de 1903, página 3.
El el cinematógrafo público se presentan algunas películas de cuyos títulos tenemos alguna referencia:
Cinematógrafo
El cinematógrafo público se instalará en la plaza de Castelar por ser sitio más céntrico y durante 7 días consecutivos podrá el público disfrutar veste ameno y sobretodo económico espectáculo.
Las cintas que se exhibirán no pueden ser de más actualidad y nuevas, entre las mismas ésta: " la muerte del Papa" y los arriesgados ejercicios del intrépido ciclista "Diávolo". El encargado de la instalación y funcionamiento de los aparatos es nuestro paisano D. Adolfo Fó.
La correspondencia de Alicante, Alicante, 1º de agosto de 1903, página 3.
También instala cinematógrafos en Cartagena, Valladolid...:
Se encuentra en Alicante procedente de Cartagena y de paso para Valladolid, donde montará el cinematógrafo público que figura en el programa de fiestas que se están celebrando, el popular artista alicantino D. Adolfo Fó.
Deseámosle feliz viaje, y muchos éxitos y beneficios.
La voz de Alicante, Alicante, 20 de septiembre de 1904, página 2.
En 1905, cuando se inaugura el Cinematógrafo de la Paz, se ocupa de las cuestiones técnicas. Sigue ocupando estas funciones el año siguiente:
Cinematógrafo de la Paz.
Ayer debutaron con éxito grandioso los autómatas Zapal, obteniendo numerosos aplausos del distinguido público que acudió al debut.
La obra escogida para la inauguración fue la bonita zarzuela titulada " el País de los sordos", para la que se estrenaron cuatro magníficas decoraciones del reputado escenógrafo D. Eduardo Amorós.
La dirección artística a cargo de D. Adolfo Fó y D. Luis de Monte, acertadísima, como asimismo la parte musical, del maestro D. Rigoberto Ventura.
Los artistas muy bien en el desempeño de sus respectivos papeles.
El programa de cinematógrafo, de lo mejor que se presenta en la actualidad.
Nuestra enhorabuena a la empresa a la que auguramos una buena temporada, siendo nosotros los primeros en recomendar al público tan ameno espectáculo.
El Pueblo, Valencia, 31 de octubre de 1906, página 2
Es operador de la sala hasta 1909, cuando ya monta su propio cine e instala luego las salas de la familia Blas Cortés:
-¿Y luego?
-Luego monté el Cine de La Paz, donde hoy está el café Continental de la calle de Peris y Valero. Allí estuve hasta la exposición de 1909, en dónde monte un cine y cuando se acabó, por indicación de mi hijo, que le tenía como operador en el antiguo cine Moderno, cuando estaba instalado en la calle de la Sangre, el dueño del mismo, padre de don Blas Cortés, me indicó la conveniencia de marchar a Játiva, a donde fui y monté lo que es hoy el salón Setabense y desde entonces soy una institución viviente de cuantos salones pasaron por manos de dicho señor y de su hijo don Blas.¡Cuántos recuerdo tiene para mí el cinematógrafo! ¡" el diablo Fó", cómo cómo me llamaban entonces, ha quedado convertido en este viejo de sesenta y cinco años!...
La Reclam, Valencia, 5 de octubre de 1924, página 5.
En esta misma entrevista, deja algunas consideraciones sobre el cine y su evolución:
-¿Entonces habrá tenido discípulos?
-¡Muchos!- contesta con energía.- casi todos los que hoy son excelentes operadores en Valencia los he llevado a cachetes y junto a mí han ido conociendo el manejo de los aparatos...
-¿Qué me dice de la afición por el cine?
-Que si en aquel tiempo me dicen lo que hoy es el cine los mando a un alienista.¡Cómo ha cambiado!¡Cuánta diferencia de las películas de entonces a las actuales! Y hasta en los aparatos...¡Entonces hubiera querido ver a los operadores de ahora entenderse con las cajas de betún que teníamos!
-¿Y de los exámenes a que están obligados, qué opinan?
-Perdone, Sinovia, que no le conteste, porque de hablar tendría que hacerlo tan recio si hasta los sordos me oirían. No tardará la ocasión en que pueda explicarle el asunto. Ahora, no. ¡Me molesta!...
El gesto del venerable anciano, del primer operador levantino, es de contrariedad, cómo lo noto en la contracción de su mano al estrechar la mía. ¿Decepción? ¿Indignación? ¡La psicología humana es tan varia...SINOVIA.
La Reclam, Valencia, 5 de octubre de 1924, página 5.
Poco después, fallece en Valencia:
Ha muerto un artista alicantino
Adolfo Fó
Adolfo Fó, aquel viejo de rostro mefistofélico alma eternamente joven, prestimano, maquietista, operador, mecánico, pendolista, artista siempre y Maestre todo, acaba de morir en Valencia.
Nacido en Alicante, muy joven, su espíritu inquieto le hizo abandonar el hogar paterno para lanzarse al mundo recorriéndolo escenario en escenario, como prestidigitador ilusionista, popularizando su nombre de Diablo Fó.
Al comenzar las primeras explotaciones cinematográficas, dedicóse a ellas y así llegó a nuestra ciudad. Actuó primero en el Cine de La Paz, de allí pasó a Novedades y finalmente al Cine Moderno, en los tiempos en que estaba instalado en la calle de la Sangre, frente al Ayuntamiento. Ya no se separó de esta empresa y con ella yo todas sus alternativas y transformaciones, siendo una institución en aquella casa.
Como en Valencia, dónde, como decimos, ha residido durante los últimos años de su vida, habíase captado en nuestra ciudad muchas amistades y sin patillas. Su familia era también muy conocida y apreciada.
Durante un largo período, cuando Adolfo Fó, hallábase en el apogeo de su actividad y recorría los escenarios mostrando la flexibilidad de su ingenio con la variedad de sus creaciones artísticas, y llegó a disfrutar una gran popularidad.
Enviamos a su apenada familia nuestro pésame.
El luchador, Alicante, 12 de enero de 1926, página 2.
Fuentes
Archivo Municipal de Alicante.