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Gerónimo Ballell trabaja en la industria taponera y emigra a Puerto Rico buscando hacer negocios en esta misma actividad. Allí se casa con la madre de Federico: Emilia Maymí, natural de Caguas (Puerto Rico), la capital del amplio y fértil valle de Turabo. La fecha en que Federico regresa a Cataluña no se conoce con exactitud, pero debe ser antes de 1880, pues en ese año ya se encuentra en Barcelona para estudiar ingeniería industrial, obteniendo el título de ingeniero en especialidad mecánica, en 1885. El 27 de diciembre de 1888, con 24 años, se casa en Barcelona con María de los Ángeles Cuyás Aguiló, natural de Mataró. Algunos recuerdos de familiares indican que ambos ya se han conocido en Puerto Rico, donde la familia de la muchacha tiene algunas posesiones. Hacia 1888, en una de sus primeras fotografías conocidas, aparece una dirección que presumiblemente pertenece a su primer domicilio como fotógrafo en la ciudad: Plaza de Cataluña 3, frente al apeadero del tranvía de Sarriá. Según las mismas fuentes familiares, el matrimonio Ballell regresa a Puerto Rico, de cuya época se conservan un buen número de negativos fotográficos. Se desconoce con exactitud la fecha en que regresan a España, aunque es seguro que lo hacen antes de la concesión de la autonomía política a la colonia caribeña y de la posterior invasión estadounidense. De hecho, en 1896 Ballell ya figura en el Anuario Riera como ingeniero y residente en la calle Rosellón nº 194, lo que indica que la pareja ya se ha establecido en Barcelona en aquel momento.

El heliocinógrafo en España (1897-1898)

La colaboración entre Federico Ballell y José Serra se debe posiblemente a dos motivos: los oficios relacionados con el corcho y la fotografía. Sabemos que José Serra dispone de un taller fotográfico en la barriada barcelonesa del Clot, calle Xifré. Van a firmar dos patentes en el año 1896, pero estas relaciones en el momento en que el cinematógrafo está empezando a difundirse por todo el mundo explican su colaboración a la hora de exhibir el heliocinógrafo. Las invenciones de los dos pioneros tienen que ver, por lo menos indirectamente, con el cinematógrafo; se trata de “un aparato para la fabricación de gas acetileno” registrado bajo el nº 19 412, el 30 de julio de 1896. La segunda patente de hecho no es más que “Mejoras en los aparatos para la fabricación del gas acetileno.” (Nº 19 978, 21 de noviembre de 1896). Desde septiembre de 1896, la prensa se interesa por esta nueva fuente de energía:

El acetileno
Pocos meses hace que conoce la ciencia este gas como materia luminico.
Esta semana hemos tenido ocasión de examinar deternidamente el aparato productor de este gas inflamable, y que a nuestro ver, vendrá a producir una verdadera revolución entre los sistemas de alumbrado actuales.
Una de las ventajas principales de dicho aparato, es, que el consumidor puede fabricarse el gas en su propia casa.
[...]
Según nos han dicho los ingenieros constructores del antedicho aparato señores Ballell y Serra, en breve será de fabricación nacional dicha sal, pues, trabájase para montar una en Barcelona.
Los aparatos constrúyanse también en Barcelona, habiéndolos de capacidades diversas, según la cantidad de mecheros que se deseen tener.

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La lucha, Gerona, domingo 6 de septiembre de 1896, p. 1.

La cuestión de la energía utilizada en los primeros aparatos es muy compleja y se puede considerar que el interés por el gas acetileno puede poner a los pioneros en contacto con el nuevo aparato aunque de manera bastante indirecta. Bajo este concepto, la presencia en Blanes de Federico Ballell y de su amigo el pintor Manuel Cuyás es significativa:

El sábado antepasado, llegaron a esta villa [Blanes] procedentes de Barcelona, el ilustrado ingeniero industrial don Federico Ballell y el notable pintor D. Manuel Cuyás, cuyos señores aprovecharon su permanencia entre nosotros para darnos a conocer un aparato sencillísimo y de absoluta seguridad para la producción del gas acetileno.
El primer ensayo tuvo efecto en casa de D. José Massó, representante en esta villa de los señores Ballell y Serra, ingenieros constructores, con patente de invención, de dichos aparatos; y el resultado no pudo ser más satisfactorio y lisonjero, pues el inmenso público que presenció la prueba quedó maravillado del resplandor y brillantez de la luz, muy superior a la del gas de hulla.
En vista del decidido éxito alcanzado, y a petición de varios amigos, el domingo hiciéronse nuevas pruebas en el concurrido Café industrial, de los señores Rovira y Serrat, y en la carnicería del Sr. Garriga, habiendo sido visitados ambos establecimientos por sinnúmero de personas que elogiaron como se merece el nuevo sistema de alumbrado, asequible a todas las fortunas, pues a las indicadas condiciones de fuerza lumínica reúne la inapreciable de la economía, ya que sólo gasta unos tres céntimos por hora, cantidad que podrá aún sufrir algún descenso en cuanto funcione en Barcelona la proyectada fábrica de carburo del calcio.
Si los ensayos que de aquí en adelante se efectúen corresponden a los hasta ahora practicados, no dudamos que los aparatos de los señores Ballell y Serra alcanzarán el favor del público, y serán muchos los habitantes de esta comarca que los adoptarán con preferencia a los hasta el día conocidos.

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El Distrito Farnense,Lloret de Mar, domingo 14 de febrero de 1897, p. 3.

Este detallado artículo podría ofrecer una pista dado que, si bien no tenemos informaciones al respecto, es muy probable que la adaptación que hacen los pioneros del cinematógrafo Lumière, si es el que utilizan, tiene que ver muy probablemente con la naturaleza de la energía utilizada y el heliocinógrafo podía ser una aplicación del invento de los catalanes.

Un aparato para la fabricación de gas acetileno, patente nº 19412, el 30 de julio de 1896
Fuente: Oficina Española de Patentes y Marcas

Cuando los dos pioneros emprenden su gira, el cinematógrafo ya no es ninguna novedad y la cuestión está más en la elección del aparato. El nombre, heliocinógrafo recuerda el del héliocinégraphe de Perret y Lacroix y el "heliocinógrafo Boussuet” que encontramos en Barcelona en el teatro Romea, en diciembre de 1897. Más tarde, en 1899, también circula por Cataluña otro heliocinógrafo llevado por Francisco Taburet (Villanueva y Geltru, julio de 1899). Nada permite afirmar que exista una relación con uno de estos aparatos. La gira de Ballell y Serra no tiene comparación alguna con la de los demás pioneros en la medida en que se circunscribe de manera muy clara a Cataluña y de hecho, principalmente, a la costa mediterránea: Masnou, Mataró, Arenys de Mar, Calella, Lloret de Mar, San Feliu de Guixols... Federico Ballell sale para Puerto Rico, probablemente en diciembre de 1897.

El corpus conocido de películas de Ballell y Serra es muy limitado y aunque las informaciones sean muy fragmentarias, la recurrencia de algunas vistas muestra que son pocas las cintas que llevan los pioneros. Se puede considerar que las vistas no pasan de unas quince si es que llegan a esa cifra. Ocho son las películas cuyos títulos se han conservado: Las vistas generales: Baños en el mar[la vista del mar ab gent banyantse en mitj de las onas; Lo efecte que causa la vista del mar es d’aquells que may s’oblidan; las onas venen de lluny ab sa cresta proeminent que ja prova lo afecte que farán al arribar a la platja y efectivament a la platja arriban y se desfan cargolantse y escumejant da la manera que ho veyem tots los dias; Varis banyistas aigua a pit, bromejan, se remullan y saltan dins de l’aigua, en tant qu’una barqueta s’allunya y se gronxa ab la naturalitat mes pasmosa.]; Partida de campo; Salida de una iglesia [se veuhen senyoras, senyoretas y noys, sortint y entrant en una capella, en la cual portalada captan alguns pobres, que reben almoynas de ditas senyoras que s’aturan a conversar entre ellas y s’en van, venintne d’altres]; Las vistas de actualidad: Paso de un regimiento; Las danzas: Danza española; Las fantasmagorías: Castillo encantado, Dibujante express Sesión de escamoteo. El número limitadísimo de vistas que traen los pioneros sólo permite apreciar que las vistas generales son pocas (cuatro entre las cuales una vista militar), que hay dos vistas cómicas, una fantasmagoría y una vista de danza. Dadas las fechas de presentación de las vistas animadas, determinar la procedencia de las cintas es muy delicado.

El heliocinógrafo y la fotografía en Puerto Rico ([diciembre] de 1897-1900)

Probablemente en diciembre de 1897, Federico Ballell vuelve a Puerto Rico donde va a presentar su heliocinógrafo en Caguas:

De Caguas: "Prepárase en esta ciudad para el sábado y domingo próximo 29 y 30 del actual, la exhibición en los salones de esta casa consistorial del famoso "Heliocinógrafo" (Cinematógrafo perfeccionado) alumbrado por gas acetileno, obtenido por los acreditados aparatos privilegiado, sistema del ingeniero don Federico Ballell Maymí, cuya parte de productos se destinarán a beneficio del Hospital de Caridad que ha de fundarse en esta ciudad. Dada la complacencia del director de dichos aparatos, auguramos un éxito favorable, notándose desde luego bastante animación por parte de este vecindario. En la esquina de los señoros Piá se exhibe un cuadro al óleo de dos metros, alusivo al expectáculo, obra del artista don Manuel Cuyás trabajo que por ser hecho muy a la ligera, revela el genio de su autor; llamando poderosamente la atención de los inteligentes.

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La correspondencia de Puerto Rico, San Juan, jueves 27 de enero de 1898, p. 2.

Vuelve a presentar su heliocinógrafo semanas más tarde, siempre en Caguas:

Se concedió la sala de esta Casa Consistorial al Ingeniero Don Federico Ballell y Maimí para exhibir un Heliocinógrafo, puesto que dicho Sr. ofrece entregar al Concejo una cantidad por cada función que celebre con detino a una obra benéfica.

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Gazeta de Puerto-Rico, San Juan, 27 de marzo de 1898, p. 4.

Se trata al parecer de una función benéfica como lo indica el siguiente anuncio:

Quedó enterado que la función, dada en esta casa Consistorial por Don Federico Ballell con destino a la erección de un hospital produjo la suma de 3 pesos 30 centavos.

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Gazeta de Puerto-Rico, San Juan, 1º de abril de 1898, p. 2.

En lo sucesivo, ya no aparece el heliocinógrafo y Federico Ballell, inslado en Ponce, se dedica a su profesión de fotógrafo aunque también aparece como ingeniero:

Federico Ballell y Maymi. Ingeniero Industrial. (Especialidad mecánica) Castillo 18 Ponce. Agosto 14.

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La democracia, Ponce, 15 de agosto de 1899, p. 3. Id. 21 de agosto.

Federico Ballell, Taller de Federico Ballell, Puerto Rico (c. 1900)
Cedida por Frederic Cuyàs Velasco
Fuente: Frederic Ballell, Fotoperiodista, Barcelona, Arxiu Municipal de Barcelona

La Democracia, Ponce, 29 mayo 1900, p. 3.

Federico Ballell va a regresa a España, en agosto de 1900, con su amigo el pintor Manuel Cuyás:

Los apreciables artistas españoles señores don Federico Ballell y don Manuel Cuyar [sic] embarcaron hoy para España acompañado de sus respectivas familias, después de haber pasado larga temporada en esta ciudad donde son generalmente estimados. Les deseamos un viaje feliz a las costas españolas.

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La democracia, Ponce, 17 de agosto de 1900, p. 3.

Regreso a España (1900-1951)

Federico Ballell regresa a Barcelona en 1900 donde ya se queda definitivamente. Sigue con sus actividades de fotógrafo y publica en la prensa algunos de sus clichés. Entre 1903 y 1917 sus fotografías indican que su domicilio profesional se encuentra en Urgel, 68, 3.º. 

F. Ballell, Paso de la comitiva por el paseo de Gracia Ilustración católica, "La Hormiga de Oro" 26 de mayo de 1906, p. 334	F. Ballell, Senadores y diputados presenciando el desfile desde la tribuna levantada al Paseo de San Juan Ilustración católica, "La Hormiga deOro" 26 de mayo de 1906, p. 337

En 1909, es uno de los socios fundadores de la Asociación de la Prensa Diaria de Barcelona y figura en los anuarios hasta 1941. Como lo recuerda la nota siguiente, sus fotografías se publican en la prensa española y extranjera: 

De totos els actes celebrats en les passades festes, n'ha prés vistes cinematográfiques un operador de la acreditada casa "Pathé Freres", que segons tenim entés s'ehxibirán dintre poh a Banyolas.
També han treballat de debó el Sr. Frederich Ballell reporter fotógrafo de Prensa Española de Madrid, A.B.C., Blanco y Negro, Esquella de la Torretxa, Ilustració Catalana y altres publicacions nacionals y extrangeres.

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Setmanari de Banyolas, Bañolas, 20 de agosto de 1911, p. 3.

Sus fotografías también se publican en La ilustración española y americana, La ilustración artística, La Campana de Gracia, etc. Su colaboración con las revistas La Ilustración Catalana y Femina es particularmente intensa (unas 2400 fotografías).

Fotografia Ballell, Efecte de llum. L'Estela de plata, 1913.
Almanach de La Esquella de la Torratxa, Barcelona, 1913, p. 21.

En los años 20 colabora en D´Ací i d´Allá y trabaja como corresponsal en revistas como Mundo Gráfico, del que es redactor artístico, o La Esfera de Madrid. Algunos testimonios familiares indican que después de la década de los veinte el pionero trabaja para el Instituto Meteorológico de la Diputación de Barcelona, algo que parece confirmar el hecho de conservarse diversas fotografías de nubes y otros fenómenos relacionados con dicha actividad. Por otra parte figura como inspector provincial de industria (verificación de líquidos y gases) en la {Guía oficial de España, Madrid: Sucesores de Rivadeneyra, 1928, p. 924.}Guía oficial de España{/tip}. 

Federico Ballell fallece en su domicilio del Paseo de San Gervasio el 16 de diciembre de 1951. Su esposa muere una semana después, el 23 de diciembre.